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Lo atractivo que es este distrito, ideado en la década de los sesenta, es la calidad de su arquitectura. Se trata de un lugar fascinante dado el encanto que desprenden sus edificios…
IJburg es un barrio de la capital de Holanda que resulta fascinante desde un punto de vista arquitectónico. Fue levantada sobre una superficie ganada al agua hace solamente unos años. Hoy en día, este barrio está compuesto por tres islas artificiales, Steigereiland, Haveneiland y Rieteilanden, ubicadas en el lago IJmeer, al este de la ciudad holandesa. Las islas están interconectadas entre sí a través de puentes e IJburg se encuentran a un cuarto de hora de tranvía de la Estación Central.
El proyecto original fue ideado en 1965 por los arquitectos Van den Broek y Bakema. Pero no fue hasta 1996 cuando el ayuntamiento de Ámsterdam decidió desarrollar este nuevo barrio, basado en diseños de tipo futurista. El proyecto no estuvo exento de críticas y controversia, ya que fueron muchos los que señalaron que su edificación supondría el fin del lago Ij, sobre el que se erige la zona. De hecho, se celebró un referéndum en el que la mayoría de los votantes rechazaron el proyecto, pero no tenía suficiente quorum y el proyecto siguió adelante.
Por el momento existen tres islas construidas, como se ha dicho, pero en el futuro está previsto que se añadan cuatro más. Para ello se facilitará el aumento de las infraestructuras del barrio, cuya principal vía de comunicación, actualmente, es el boulevard ijburg, que conecta las islas entre sí. Además, existe una línea de tranvía que une las islas con la estación central de Ámsterdam.
Hoy en día, alberga a 18.000 apartamentos y a unos 45.000 habitantes. Se trata de una joya de la ingeniería. Sin duda alguna, su visita os sorprenderá de principio a fin. Os recomiendo pasear por sus calles, contemplar como el genio humano ha ganado terreno al agua, tomar muchas fotografías espléndidas y relajarse mientras uno anda por una zona singular y original. Ideal para pasar una tarde agradable en Amsterdam.
Como podréis imaginar su proceso constructivo es de todo menos convencional. La cimentación, si se puede llamar así, es un cubo hueco de hormigón armado construido sin juntas (para evitar posibles filtraciones que podrían provocar el hundimiento). Sobre ella seconstruyen unas cajas más ligeras que recuerdan a contenedores portuarios, conformando las plantas superiores de la vivienda.
Las casas se construyen en un astillero a 70km y después se transportan por agua con ayuda de barcazas remolcadoras hasta su posición final. Es por eso que su ancho es limitado, se debe adaptar al ancho de los canales y puentes que se recorren por el camino. Una vez en su ubicación, es hora de estabilizarlas para que sus usuarios apenas noten el movimiento del mar. Como si de un barco se tratara, se amarran a dos pilotes situados diagonalmente y anclados en el subsuelo, de manera que el movimiento del mar no les afecte. Además, se debe distribuir uniformemente el peso de los elementos interiores para permitir la horizontalidad.
Leer: Arquitectura flotante
Fuentes: Marlies Rohmer Architects / ijburg.nl
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